Iluminando el camino hacia un tratamiento más eficaz

El nuevo láser GreenLight del Hospital Markham Stouffville está reduciendo las estancias hospitalarias y los tiempos de espera para las operaciones de próstata.

En un quirófano a oscuras, el Dr. Adeel Sheikh, urólogo del Hospital Markham Stouffville (MSH) de Oak Valley Health, se pone unas gafas de color morado, al igual que el resto de profesionales médicos que le rodean. El Dr. Sheikh recibe un instrumento quirúrgico -un tubo largo y delgado conectado a una máquina que una enfermera enciende- que se ilumina en verde neón, tiñendo la sala de un resplandor futurista.

Es la primera vez que el Dr. Sheikh y su equipo utilizan el nuevo láser GreenLight del hospital, y están a punto de hacer mucho más fácil la vida de Bradley Steele, un residente de Markham de 59 años y especialista en seguros de riesgo.

Como muchos hombres de cincuenta y tantos años, cuando Steele se dio cuenta de que su próstata era el origen de sus molestias, ya sentía las repercusiones en todos los aspectos de su vida.

"No te das cuenta porque ocurre todos los días y aumenta muy lentamente", señala. "Y de repente dices: 'Un momento, me levanto cada hora y media para ir al baño. ¿Qué está pasando aquí?".

En cierto modo, es como la analogía de la rana en el agua: colocar una rana en una olla de agua y subir lentamente el fuego hasta que hierva. La rana no se dará cuenta de que algo va mal hasta que sea demasiado tarde.

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Dr. Sheikh y Bradley Steele

Efectos de gran alcance

Steele sufría una afección muy común en los hombres (o personas asignadas al sexo masculino al nacer) a medida que envejecen: hiperplasia prostática benigna (HPB) o próstata agrandada. La próstata rodea la uretra, pero cuando aumenta de tamaño empieza a constreñirla, lo que provoca una larga lista de síntomas relacionados con la micción. Entre ellos se incluyen la disminución del flujo y la incapacidad para vaciar completamente la vejiga, lo que a menudo hace que la persona sienta una mayor necesidad de orinar y, en algunos casos, dolor.

En Canadá, más del 50% de los hombres de sesenta años presentan síntomas de HBP, y esa cifra aumenta hasta aproximadamente el 90% en el caso de los hombres de ochenta y noventa años. A veces la medicación puede controlar la afección, pero cuando eso no funciona, es necesaria la cirugía para ahuecar la parte interna de la próstata.

Puede no parecer gran cosa, pero esa continua anticipación de la necesidad de orinar puede tener un grave impacto en la calidad de vida de una persona. En el caso de Steele, estaba constantemente ansioso por saber si sería capaz de llegar al baño a tiempo, o por molestar a la gente a su alrededor en teatros y aviones. Pero aunque la carga mental era importante, fue el impacto físico lo que llevó a Steele a buscar consejo médico en la primavera de 2023.

"Fui a ver a mi médico de cabecera y le dije: 'Mire, ya no puedo más. Esta no es una buena vida'", relata. "Estaba despierto cada 15 o 20 minutos algunas noches y cansado todo el tiempo".

El médico de cabecera de Steele le remitió al Dr. Sheikh del MSH, especializado en cirugía mínimamente invasiva. El Dr. Sheikh realizó una consulta rápida y le dijo que era un buen candidato para la cirugía, y dio la casualidad de que el hospital había adquirido recientemente un láser GreenLight, financiado con el generoso apoyo de la comunidad a través de la Fundación del Hospital Markham Stouffville. Preguntó a Steele si estaba dispuesto a ser uno de los primeros pacientes, y éste dijo que sí.

El Dr. Sheikh me devolvió la vida.

Bradley Steele

Ventajas evidentes

La intervención quirúrgica más común para la HBP se realiza por vía endoscópica a través de la uretra, durante la cual el cirujano ahueca la próstata rasurando el tejido con un asa de cauterio. Es eficaz, pero hay bastante hemorragia y los pacientes deben permanecer en el hospital unos días para recuperarse.

En los últimos años, sin embargo, el láser GreenLight se ha convertido en la herramienta preferida porque permite a los cirujanos vaporizar el tejido prostático, eliminando la mayor parte de la hemorragia. Y lo que es aún mejor, la cirugía es ahora un procedimiento ambulatorio, lo que permite a los cirujanos dar el alta a los pacientes el mismo día y liberar camas de hospital muy necesarias.

"Cuando les dices a los pacientes que tienen que operarse, su primera pregunta es: '¿Cuánto tiempo tengo que estar en el hospital?", señala el Dr. Sheikh. "Y poder decirles: 'Es sólo una intervención de un día', les tranquiliza mucho y les ayuda a aceptar la necesidad de la cirugía. Y después quedan muy satisfechos, así que es un procedimiento muy gratificante."

El Dr. Sheikh calcula que entre el 70% y el 80% de las intervenciones relacionadas con la HBP que se realicen en el MSH se harán con el láser GreenLight, mientras que la cirugía endoscópica o abierta se utilizará para otros casos en los que sea necesaria una biopsia de tejido. Esta medida aumentará la capacidad del hospital para tratar este problema frecuente y reducirá los tiempos de espera. El Departamento de Cirugía del MSH está abordando la tarea de aumentar la capacidad y reducir los tiempos de espera desde múltiples ángulos: la apertura de un noveno quirófano en 2024 y el inicio de una campaña de recaudación de fondos para adquirir nuevos equipos de robótica quirúrgica.

En cuanto a Steele, no puede creer la diferencia que ha supuesto esta operación. Puede dormir toda la noche y ya no le preocupa ir al baño cuando está fuera.

"Esto me ha cambiado las reglas del juego", señala. "Es algo físico, pero también ha aliviado la presión mental, la ansiedad y la posible vergüenza. El Dr. Sheikh me ha devuelto la vida".