Neil Sweeney en el Hospital Markham Stouffville

Diecinueve años de donaciones y voluntariado

Markham tenía un aspecto muy diferente cuando Neil Sweeney y su familia se mudaron a la comunidad hace muchos años.

El compromiso de dar

Markham tenía un aspecto muy distinto cuando Neil Sweeney y su familia se mudaron a la comunidad hace muchos años. "El hospital era un solar vacío donado por un antiguo residente de Markham", dice Neil.

Por aquel entonces, Neil no tenía ni idea de la importancia que tendría en su vida el Hospital Markham Stouffville (MSH) de Oak Valley Health, pero sí sabía lo importante que era contribuir. Él y su mujer, Carol, hicieron su primera donación en 1983.

"Hicimos donaciones al hospital durante el periodo inicial de recaudación de fondos", recuerda Neil. "Dimos porque MSH sería nuestro hospital local y nos ahorraría viajes a Toronto si necesitábamos atención".

Desde entonces, los Sweeneys no han dejado de donar, orgullosos de contribuir mensualmente. "Las donaciones mensuales garantizan nuestro compromiso con el hospital", explica Neil. "Además, no tenemos que acordarnos de dar: nuestra donación se hace automáticamente".

Las donaciones mensuales son sólo una de las formas en que la familia de Neil apoya al hospital comunitario. Pasa todos los lunes, así como otros turnos según sea necesario, ayudando en la clínica de quimioterapia.

Neil Sweeney en el Hospital Markham Stouffville

Encontrar un propósito en la jubilación: el voluntariado en MSH

Neil se había jubilado recientemente de su distinguida carrera policial cuando él y Carol fueron al hospital a visitar a una amiga que trabajaba como enfermera en la clínica de quimioterapia. El amigo preguntó a Carol cómo le iba a Neil con su jubilación, y Carol respondió: "Neil realmente necesita algo que hacer".

El amigo sugirió a Neil que se reuniera con Magda Rigo, la responsable de Servicios Comunitarios (Voluntarios) en aquel momento, para explorar un posible papel de voluntario. "La sinceridad, calidez y presentación de Magda me hicieron sentir que MSH era el lugar donde necesitaba pasar un par de años devolviendo a mi comunidad", dice Neil. "De eso hace ya 19 años".

Este es nuestro hospital. Es el lugar del que dependemos en momentos de estrés familiar. Demos 5 dólares o 5 millones, nuestro apoyo es importante.

Neil Sweeney

Una segunda familia

Como puedes imaginar, Neil ha aprendido mucho sobre el hospital y su personal a lo largo de los años. Lo que ha descubierto le ha hecho sentirse aún más orgulloso de apoyar a su hospital. Neil llama al equipo del MSH su "segunda familia" y dice que una "experiencia positiva y acogedora" comienza en el mostrador de registro cuando el paciente entra en la clínica.

"Los pequeños detalles son los que más aprecian nuestros pacientes", dice Neil. "Como éste es un hospital comunitario, nuestros médicos y enfermeras tienen la oportunidad de conocer a los pacientes y a sus familias. Los pacientes aprecian que sean algo más que otra cara".

Neil ha experimentado de primera mano una atención excepcional al paciente en MSH. Ha visitado varias veces el Servicio de Urgencias y también ha estado ingresado.

"Cuando fui paciente durante unos días, me impresionó la atención y la profesionalidad de todas las personas con las que entré en contacto", recuerda Neil. "Cuando el personal entraba en mi habitación, me saludaban con una sonrisa y me preguntaban si necesitaba algo. Esta actitud ha sido una experiencia de 19 años en cualquier lugar del hospital al que me ha llevado mi trabajo."

Necesidad de apoyo comunitario

Además de ver de cerca la destreza y compasión de los equipos de MSH, Neil también comprueba la continua necesidad de equipos y tecnología.

"La provincia aporta fondos generales para mantener los hospitales abiertos y en funcionamiento. Pero cuando se trata de otras prioridades, el hospital depende de la comunidad", explica Neil. "Nuestro apoyo es vital para la compra de equipos avanzados que ayuden a los profesionales sanitarios a hacer su trabajo con eficacia y eficiencia".

Por este motivo, Neil anima a los miembros de la comunidad a que se unan a él como donante mensual y contribuyan a que toda una vida de cuidados esté cerca de casa. Como él mismo dice, las donaciones mensuales proporcionan un flujo constante de ingresos con los que la Fundación MSH puede contar para adquirir equipos vitales. "Equipos que pueden salvar tu vida o la de un familiar".

Nuestras historias

Historias de atención y compasión y el poder de tu ayuda.
Cerca de casa
Más allá de su práctica
Esperanza en medio del diagnóstico
Diecinueve años de donaciones y voluntariado
Supervivencia y gratitud
Resiliencia ante la adversidad
La familia Morris: Definir su legado
Encontrar un lugar seguro a través de la terapia en MSH
Toda una vida de bondad
Consuelo y esperanza en MSH
Iluminando el camino hacia un tratamiento más eficaz
Temporada de dar, temporada de cuidar
Una buena noticia
Generaciones de generosidad
Asistencia de vanguardia
En el centro de la asistencia
Lazos familiares
Un dúo dinámico
El camino de vuelta a la salud